Habitantes de Buctzotz ya no confían en sus representantes políticos; Pilar Santos y Julián Zacarías no convencen.
Si no fuera por el apoyo masivo que recibió, la visita de Julián Zacarías Curi a Buctzotz habría pasado desapercibida. Sin embargo, lo que realmente llamó la atención fueron las expresiones de desilusión en los rostros de los asistentes, quienes ya no confían en sus representantes políticos, especialmente en la diputada Pili Santos Díaz.
En el distrito, Pili es conocida como “Pili Mentiras”, un apodo que refleja la falta de confianza que ha generado entre la población. Últimamente, se ha dedicado a distribuir apoyos y organizar eventos en su ciudad natal, Buctzotz, descuidando por completo las necesidades de su distrito. Incluso los alcaldes de su propio partido la desaprueban, ya que se sabe que “Pili Mentiras” se apropia de los eventos en los que los ediles han invertido, apareciendo únicamente para tomarse fotografías.
Ahora, bajo la premisa de querer destacar el apoyo a los emprendedores, Pili busca desesperadamente mejorar su imagen en su pueblo natal. Sin embargo, la gente no confía en ella debido a sus acciones pasadas. En su oficina de enlace en Izamal, solía ignorar a quienes buscaban su ayuda, lo que la llevó a cerrar el lugar después de su primer año como diputada.
El futuro parece incierto para los habitantes de Buctzotz y sus alrededores, ya que temen que, de llegar al poder, “Pili Mentiras” no se preocupará por sus necesidades, tal como lo demostró en su propio distrito, donde algunos municipios y comisarías nunca volvieron a verla.
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