EDITORIAL…

Decreto vs inflación  

Un sondeo realizado al azar en el primer cuadro de la ciudad, mostró la realidad tajante: nueve de cada diez personas jamás creyeron en la versión oficial que aseguraba que en 2023 no habría “cuesta de enero”.

Sí, lo dijo “ya saben quién” en sus tradicionales mañaneras. Y el tema no es sólo eso, sino el enojo de la gente porque el aumento salarial del 20% quedó pulverizado en el mismo momento en que fue autorizado.

Los 207 pesos diarios por jornada laboral, a partir del uno de enero de este año, que fueron anunciados con bombo y platillo, no alcanzan para adquirir la canasta básica.

¿Y sabe por qué?  Porque el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC) que es un acuerdo entre el Gobierno de México, productores, distribuidores y comerciantes, a través del cual se busca garantizar precios justos en los productos de la canasta básica, no tuvo éxito en sus primeras dos versiones.

Y lo que es peor, la tercera edición que entrará en vigor este año, por decreto presidencial, otra vez, está destinada al fracaso, luego de que el 2022 cerró con una inflación anual de 7.82%, la más alta en los últimos 22 años.

Si los expertos del Instituto Mexicano de Ejecutivos en Finanzas (IMEF), y los integrantes de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), coinciden en que este año habrá una recesión económica a nivel mundial, usted ya sabe lo que viene, así que ya no habrá nada que lo sorprenda.

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